¿Qué es un tratamiento de conductos?
En los últimos tiempos, muchas personas han comenzado a cuestionar si los tratamientos de conductos son perjudiciales para la salud. Como endodoncista con años de experiencia, quiero explicar qué es un tratamiento de conductos y por qué sigue siendo un procedimiento clave en odontología.
Se trata de un tratamiento utilizado para salvar dientes que han sido gravemente afectados por caries profundas, fracturas o infecciones que llegan al nervio. En un tratamiento de conductos, eliminamos la infección dentro del diente, limpiamos el conducto radicular y lo sellamos con un material biocompatible. Este procedimiento permite conservar el diente en la boca durante más tiempo, evitando una extracción inmediata.
¿Por qué algunas personas piensan que los tratamientos de conductos son malos?
Aunque este tratamiento tiene décadas de éxito comprobado, hay quienes afirman que los tratamientos de conductos pueden ser perjudiciales, causando infecciones crónicas o afectando al cuerpo en general. Estas ideas, en muchos casos, carecen de respaldo científico y suelen basarse en experiencias negativas con tratamientos mal realizados.
En mi clínica, he tratado muchos casos que demuestran lo contrario. Quiero compartir un caso reciente que ilustra claramente cómo un tratamiento de conductos bien hecho puede marcar una diferencia positiva en la salud del paciente.
Caso clínico: un tratamiento de conductos que marcó la diferencia
Un paciente de 18 años acudió a mi consulta con una infección grave en un diente. En la radiografía inicial, la lesión era muy evidente, ocupando casi la mitad del tamaño del diente. Otros especialistas habían recomendado extraerlo y reemplazarlo con un implante de circonia, argumentando que el tratamiento de conductos no sería efectivo para resolver la infección.
Radiografías iniciales
La infección era tan severa que, al observarla en 3D, parecía un agujero en el hueso. Incluso al levantar la encía del paciente, se podía notar la cavidad que rodeaba la raíz del diente.
A pesar del daño, optamos por realizar un tratamiento de conductos. Sabíamos que, por su edad y el estado general de su salud, había una excelente posibilidad de salvar el diente con este tratamiento.
El tratamiento
El procedimiento consistió en:
- Limpiar profundamente los conductos radiculares.
- Asegurar el aislamiento adecuado con un dique de ule para evitar contaminación.
- Administrar antibióticos para complementar la recuperación.
La precisión y la atención al detalle fueron clave para garantizar el éxito del tratamiento.
Los resultados
Seis meses después, las radiografías mostraban una notable mejoría. La lesión se había reducido drásticamente y el hueso alrededor del diente comenzaba a regenerarse de manera natural.
Este caso refuerza algo que he visto repetidamente en mi carrera: un tratamiento de conductos bien hecho no solo no daña el cuerpo, sino que puede promover su capacidad natural de recuperación. Si los tratamientos de conductos fueran realmente perjudiciales, ¿cómo explicamos que el cuerpo sane en presencia de un diente tratado?
Factores clave para el éxito de un tratamiento de conductos
Para lograr resultados como este, es esencial cumplir con ciertos estándares:
- Aislamiento adecuado: El uso del dique de ule previene la contaminación durante el procedimiento.
- Limpieza completa del conducto: Eliminar la infección por completo es fundamental.
- Diagnóstico preciso: Una evaluación detallada del caso es el primer paso hacia el éxito.
- Uso adecuado de antibióticos: Estos complementan el proceso de recuperación cuando son necesarios.
Los tratamientos de conductos mal realizados, por el contrario, pueden generar complicaciones. Por eso, recomiendo siempre acudir a especialistas capacitados que trabajen con profesionalismo y ética.
Reflexión final
Como endodoncista, mi objetivo siempre es salvar dientes cuando sea posible, utilizando las mejores técnicas y materiales disponibles. Sin embargo, hay casos en los que el daño es irreparable y se debe optar por una extracción.
Mi mensaje para mis pacientes y lectores es claro: confíen en la evidencia científica y en su dentista. En nuestra clínica, trabajamos con el compromiso de garantizar que cada tratamiento esté respaldado por la experiencia y la evidencia.
Los tratamientos de conductos son un procedimiento seguro y efectivo cuando se realizan correctamente. No permitan que la desinformación los aleje de tratamientos que pueden salvar sus dientes y mejorar su calidad de vida.
Espero que esta información te sea útil. Recuerda que cuidar tu salud bucal es una inversión en tu bienestar general. Si tienes dudas o necesitas una evaluación, no dudes en visitarnos en la Clínica Cristian Lagos en Los Ángeles. ¡Estoy aquí para ayudarte! 😊
Dr. Cristian Lagos
Endodoncista y director de la clínica Cristian Lagos en Los Ángeles
Clínica Cristian Lagos, Libertad 760,Los Ángeles.